Si tu perro o gato ha dejado de comer sus croquetas, no siempre es un capricho o señal de enfermedad. Una causa frecuente es que las croquetas se hayan rancidado, perdiendo sabor y valor nutricional.

¿Qué es el ranciamiento?
El ranciamiento ocurre cuando los lípidos de las croquetas reaccionan con el oxígeno. Esto produce compuestos como aldehídos, cetonas e hidrocarburos, que pueden tener un sabor amargo y, en algunos casos, generar moléculas potencialmente dañinas para el ADN o las membranas celulares.
Además, las vitaminas liposolubles (por ejemplo, la vitamina A) pueden degradarse, reduciendo el valor nutricional del alimento.
¿Por qué es importante preocuparse?
- Sabor y apetito: los animales perciben los sabores amargos y pueden rechazar el alimento.
- Salud a largo plazo: los compuestos tóxicos se acumulan con el tiempo, aunque el riesgo inmediato suele ser bajo.
Factores que aceleran el ranciamiento
- ☀️ Exposición a la luz directa o rayos UV
- 🔥 Altas temperaturas
- 🌬️ Contacto con el aire
- 🧴 Presencia de grasas poliinsaturadas (omega-3 y omega-6), saludables pero más delicadas
Cómo prevenir el ranciamiento
- Mantén las croquetas en su empaque original o en un recipiente opaco, grueso y hermético.
- Guarda el alimento en un lugar fresco, seco y alejado de la luz.
- Prefiere sacos pequeños que se consuman en poco tiempo.
- Busca fórmulas enriquecidas con antioxidantes naturales (tocoferoles o vitamina E).
- No dejes las croquetas servidas por muchas horas al sol o al calor.
En la práctica: alimentos susceptibles al ranciamiento
Estos son los tipos de alimentos secos que pueden oxidarse y perder calidad, afectando a tus mascotas si no se almacenan correctamente:
- Perros y gatos: croquetas y snacks grasos
- Conejos y roedores: piensos prensados y semillas
- Aves: mezclas de semillas, especialmente las ricas en grasas poliinsaturadas
- Peces ornamentales: piensos secos en escamas o gránulos
⚠️ Riesgos: cambio de sabor y olor, pérdida de nutrientes, y en casos extremos, formación de compuestos potencialmente dañinos.
Conclusión
El ranciamiento de las croquetas es un proceso natural que puede afectar tanto el sabor como la salud de tus mascotas. Almacenar correctamente los alimentos, elegir fórmulas con antioxidantes y estar atentos a los signos de rechazo son medidas clave para mantener a tus mascotas sanas y felices.